domingo, 18 de diciembre de 2016

Despedida del año

            

 Despedida del año



        TODA LA FAMILIA DE GENERACIÓN JOVEN



                           



                                                                   


                                                         









































martes, 29 de noviembre de 2016

"PACTOS DE DINERO, PAGO DE ENTRADAS, CACHET"




"PACTOS DE DINERO, PAGO DE ENTRADAS, CACHET"
La comercialización de la fe

Cachet: en las jergas Argentinas significa: la cotización de un artista en el mercado. (la tarifa que cobra)

Muchos han transformado el evangelio en empresas multinacionales, vendiendo, cobrando, armando todo un merchandising del ministerio, para incrementar la rentabilidad, banderines, llaveros, prendedores, gorritos, lapiceras, stickerts, calcos, remeras, cuadros, adornos, etc. etc.
También los llamados "pactos" de dinero, en los que se incentiva a colocar dentro de un sobre, cierta cantidad, para obtener algún tipo de bendición especial.
 Además nunca podemos nosotros los seres humanos "pactar" con Dios, y menos con dinero, pacto significa: un contrato, concierto  o convenio entre partes para OBLIGARSE mutuamente.
Alguien que conoce a Dios, ¿puede creer remotamente que algún ser humano, la criatura, puede "obligar" al Creador a algo? es delirante pensar así.
Ofendemos a Dios cuando pretendemos con dinero "comprar" algún favor.
Lo que el hombre puede hacer es un propósito, o un voto con Dios, una promesa de ayudar en la obra, ayudar algún obrero de Dios, puede donar o cooperar en algún ministerio, conforme sienta de hacerlo, de voluntad, por gratitud, aún el diezmo no puede ser obligado, debe ser un propósito.
"Comprar" una bendición a través de un "pacto"; pacto que hace el hombre, (una sola parte, con quien no necesita y es dueño de todo) no tienen respaldo bíblico, por el contrario, contradice ciertos principios cristianos, como:

"Mía es la plata, y mío es el oro, dice Jehová de los ejércitos" (Hageo 2:8)

Dios no necesita de nuestro dinero, nosotros necesitamos de el, cuando ofrendamos lo hacemos porque nosotros necesitamos, no Dios.

"Sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata" (1 Pedro 1:18)

Nunca pretendas "comprar" nada de Dios, con algo tan corruptible como el dinero, lo de Dios, comenzando por la salvación y el perdón de nuestros pecados, se obtienen por gracia, y gracia significa: "favor inmerecido". (de gratis) Recibimos de gracia y debemos darlo de gracia.

"Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado. Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia: No os proveáis de oro, ni plata, ni cobre en vuestros cintos..." (Mateo 10:7-9)

Hay un precedente en la historia de la Iglesia del primer siglo:

Un hombre que se había convertido y bautizado escuchando la predicación del evangelista Felipe, observó la operación de un don:

"Cuando vio Simón que por la imposición de las manos de los Apóstoles se daba el Espíritu Santo, les ofreció dinero, diciendo: Dadme también a mi ese poder, para que cualquiera a quien yo le impusiere las manos reciba el Espíritu Santo. Entonces Pedro le dijo: Tu dinero perezca contigo, porque has pensado que el don de Dios se obtiene con dinero. No tienes tú parte ni suerte en este asunto, porque tu corazón no es recto delante de Dios. Arrepiéntete, pues, de esta tu maldad, y ruega a Dios, SI QUIZÁS te sea perdonado el pensamiento de tu corazón" ( Hechos 8:17-22)

Aquí se ve la posición de Dios en este tema, por la respuesta de Pedro, no se pueden "comprar" las bendiciones, ni los favores, ni los dones de Dios, no podemos pagar por predicación o por alabanzas, tampoco por las enseñanzas bíblicas.
Pablo tenía muy en claro, el por que predicaba y enseñaba:

"Pues si anuncio el evangelio, no tengo porque gloriarme; porque me es impuesta necesidad; y ¡ay de mi si no anunciare el evangelio!" ( 1 Corintios 9:16)

No estoy aparte de que la Iglesia necesita del dinero, los siervos de Dios viajan, se hospedan, se visten, comen, tienen familia, las congregaciones pagan rentas, servicios, radios, infraestructuras, etc. un evento importante requiere de mucho dinero.
Los recursos, deben obtenerse en el diseño de Dios, como enseña la Escritura, los cristianos son bendecidos y AGRADECIDOS, así aprenden a dar, se les enseña a dar, a ser generosos, y hacerlo voluntariamente, sus ofrendas, las primicias y sus diezmos, no hay necesidad de transformar el templo en un mercado.
No hace falta vender nada dentro de la Casa del Señor, ni hacer rifas, ni bingos, ni concursos, ferias o desfiles, ni los llamados "pactos", ni vender entradas o tickets, ni establecer una tarifa para predicar o cantar.
Si alguien quiere hacer su negocio, y este negocio es honesto, hágalo fuera de las cosas de Dios, no usen las cosas de Dios para mercadeo.
Parece que nos olvidamos que la única vez que Jesús enfureció, fue cuando se encontró con los mercaderes dentro del templo, que vendían y compraban, tiró las mesas y las sillas y los echó con un azote de cuerdas (Mateo 21:12-13) y tampoco debemos olvidar que ese templo sería destruido, no quedaría piedra sobre piedra, (el mismo lo profetizó) ¿porque tanto celo entonces? por lo que representaba y por lo que se hacía en un lugar que tenía un propósito más elevado "casa de oración".

Fuente: Pastor Sergio Gebel

"ROPAS, VESTIDOS, ATAVÍOS" ¿Hay un porte para el cristiano?


"ROPAS, VESTIDOS, ATAVÍOS"
¿Hay un porte para el cristiano?

La Biblia utiliza esta palabra (desconocida para muchos) 
"Porte"

"Las ancianas ( cristianas maduras, antiguas) sean reverentes en su porte..." (R.V.versión 1960)
"Las viejas, asimismo se distingan en un porte santo..." (R.V. versión 1959) (Tito 2:3)

Porte: significa buena o mala disposición o aspecto de una persona, mayor o menor decencia con que se trata.

Estamos en un tiempo dentro de las Iglesias Cristianas, donde no se le da ninguna importancia sobre las enseñanzas que se refieren al aspecto exterior, a las vestimentas, el cabello, el arreglo, el maquillaje, etc. descontextualizando el concepto de que a Dios solo le interesa el corazón, (lo que es una media verdad, y las medias verdades no son toda la verdad) 
Muchísimos pasajes nos indican con claridad, que hasta la muerte, donde nos desprenderemos del cuerpo somos seres tripartitos, e indivisibles: espíritu, alma y cuerpo, en la conversión somos transformados en manera integral, por dentro y por fuera, no hay una conversión interna u otra externa:

"Y el mismo Dios de paz os santifique POR COMPLETO; Y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo" (1 Tesalonicenses 5:23)

Si cuidas solo el interior y descuidas lo externo, habrá una parte de ti, que no será irreprensible cuando Cristo venga, "espíritu, alma y cuerpo"
Al decir que Dios no mira el exterior, es una afirmación ignorante, Pablo enseñaba que el cuerpo del cristiano, es templo del Espíritu Santo, (no el corazón) 

"¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios y que no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad , pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu (por fuera y por dentro) , los cuales son de Dios." (1 Corintios 6:19-20)

Hay claras enseñanzas apostólicas, para la Iglesia, (que se pretenden obviar) sobre las vestimentas, o atavíos, que deben siempre destacar ese "porte santo" o como dice la otra versión: "un porte reverente", no provocativo, honesto, con pudor, con decencia.

"Vuestro atavío no sea el externo de peinados ostentosos (encrespamiento de cabellos, versión 1959) de adornos de oro (zarcillos, pulseras, anillos, cadenas) o vestidos lujosos ( composturas de ropas) sino el interno, el del corazón, en el incorruptible ornato de un espíritu afable y apacible..." (1 Pedro 3:3-4)

"Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa (hábito honesto), con pudor (con vergüenza)  y modestia; no con peinados ostentosos (cabellos encrespados) , ni oro, ni perlas, ni vestidos costosos" (1 Timoteo 2:9)

La Biblia habla de nuestras vestimentas, adornos, y nuestros cabellos.
Además de estas y otras enseñanzas apostólicas, desde el Génesis encontramos a Dios diseñando las primeras prendas para Adán y Eva, y cubriendo su desnudez, también diseña las ropas sacerdotales, desde los colores hasta los adornos, da especificaciones bien claras sobre el atuendo de los Levitas para ministrar en el santuario, los porteros, los músicos, todos los que estuviesen involucrados con el oficio sagrado, debían vestir de una manera especial.
Dios hasta diseña la ropa interior de los sacerdotes, "paños de lino para sudar", (una especie de chiripa) esto era para que cuando el sacerdote subiese las gradas del templo, no se descubriera su carne desnuda.
"Un porte santo" significa un aspecto diferente a las tendencias de las modas, santo quiere decir: "apartado o separado para Dios", puesto aparte, se debe mostrar una diferencia, honrar a Dios, honrando tu cuerpo, que por otra parte, las personas creyentes o no, no ven mi corazón, ven mi cuerpo, el mundo entero ve nuestro cuerpo.
La congregación no puede ver "el corazón" de la jovencita que luce una falda trasparente, corta, ceñida, ajustada, o unos pantalones que marcan sus formas, o un escote provocativo, todos vemos su cuerpo, y esto no habla de santidad indudablemente.
Cualquier empresa importante, para calificar en un empleo debes tener "buena presencia", (es uno de los requisitos) un empleado público, un funcionario, debe ajustarse a un protocolo, hasta un reo para comparecer ante los jueces y tribunales se ajusta a una imagen de seriedad... no puedes aspirar a un cargo importante sino te quitas las zapatillas, la remera y el gorrito.
Nunca te designarán para tratar con los clientes si no dejas la bermudas para las vacaciones.
Y creo que está demás aclarar, que estas enseñanzas no son para los que asisten a una reunión, (aquellos que queremos ganar para Cristo, estos que vengan como quieran, pero que vengan), las enseñanzas son para los cristianos, miembros de la Iglesia, mayormente el liderazgo.
Vestirnos honestamente, sin ostentaciones, ni "adornos", no significa  lo que se da en muchas congregaciones, donde hay hasta una "competencia" de modas, como una pasarela, donde en cada reunión, se muestran los maquillajes, peinados, calzados, brillos, joyas, vestidos, pantalones ajustados o transparentes, escotes o blusas provocativas, en las mujeres, o por otro lado los jóvenes en zapatillas, remeras, bermudas, como si asistieran a un recital o un baile.
El mismo liderazgo perdió esa "compostura" que pedían los apóstoles a la primera Iglesia, parecen más actores de Hollywood que representantes de Cristo.
Y no estoy haciendo una apología del abandono, se puede vestir en forma moderna y a la época, sin perder la vergüenza (el pudor). honestamente honrando a Dios y lo que representamos...
Y por último, no solo hay una conducta en nuestro vestir, cuando venimos a la Iglesia, sino todo el tiempo, en casa, en el trabajo, en la escuela, en vacaciones, en la calle, somos hijos de Dios las 24 horas, no solo los domingos.

Fuente: Pastor Sergio Gebel

¿Quién es digno?


¿Quién es digno?
 
Se sabe que ante la presencia de un rey o alguna autoridad no puede presentarse cualquier persona, es decir que no hay acceso libre ante su presencia, a no ser que haya sido llamado o haya solicitado una audiencia con dicha autoridad.
Salmos 24:3 dice: “¿Quién puede subir al monte del Señor? ¿Quién puede estar en su lugar santo?” (NTV), es cierto que Dios es misericordioso y que por el sacrificio de su Hijo en la cruz tenemos acceso libre ante su presencia, pero Dios es un ser divino y por amor y respeto debemos procurar presentarnos limpios ante su presencia; quizás ahora te estés preguntando ¿Qué necesito para ser digno? o ¿Qué necesito para estar delante de Dios?
“Solo los de manos limpias y corazón puro, que no rinden culto a ídolos y nunca dicen mentiras”Salmos 24:4 (NTV), estás palabras nos muestran lo que cada hijo de Dios debe considerar para estar ante la presencia de su Padre.
       - Manos limpias.- Procurar que nuestras acciones no dañen a Dios, a uno mismo y a los demás, cuidar lo que el cuerpo hace.
       - Corazón puro.- Cuidemos que nuestro corazón retenga lo bueno, lo justo y honorable y no haya nada que sea motivo para acusarnos.
     - No rendir culto a los ídolos.- Dios es soberano y recibe a aquel que le ha dado el lugar que le corresponde en su vida y corazón; si hay algo que ha ocupado el lugar de Dios, sácalo.
       - Nunca dicen mentiras.- Nuestras palabras deben ser verdaderas y confiables, no consintamos la mentira aunque con ella tratemos de evitar algún daño, recuerda Dios demanda honestidad y veracidad.
Quizás analizando tus acciones y pensamientos llegaste a la conclusión de que no eres digno de Dios cuán lamentable es reconocer la condición pecadora del hombre, pero recuerda esta palabra y su significado: “PERDON”. Dios puede perdonarte y limpiarte del pecado que te hace indigno y tu presencia ante Él será como un perfume inigualable y agradable.
Fuente: Judith Quisbert CVCLAVOZ

lunes, 28 de noviembre de 2016

30 preguntas: ¿Estoy listo para dejar la soltería?


30 preguntas: ¿Estoy listo para dejar la soltería?

La mejor manera de no tener una mala relación amorosa es no entrar a ella si no se está listo. Es por ello que uno debe trabajar en sí mismo antes de tener una pareja y entender bien qué es el amor, antes de confundirlo por una simple ilusión del momento.
El amor es paciente y bondadoso. El amor no es celoso ni fanfarrón ni orgulloso ni ofensivo. No exige que las cosas se hagan a su manera. No se irrita ni lleva un registro de las ofensas recibidas. No se alegra de la injusticia sino que se alegra cuando la verdad triunfa. El amor nunca se da por vencido, jamás pierde la fe, siempre tiene esperanzas y se mantiene firme en toda circunstancia.*
Con esta definición de amor y con estas 30 preguntas podrás saber si estás listo para dejar atrás la soltería y comenzar una relación sentimental:
¿Cómo está mi autoestima?¿Estoy consciente de que mis problemasemocionales no serán suplidos al tener una pareja?¿Quiero tener una pareja solo para sentirme acompañado?¿He arreglado todos los dilemas con mis relaciones pasadas?¿He superado a mi pareja anterior y estoy listo para avanzar sin temor?¿Estoy listo para poner las necesidades de mi pareja antes que las mías?¿Cuán serio estoy sobre esta relación?¿Cuáles son mis intenciones a corto o largo plazo con la persona con quien quiero iniciar una relación amorosa?Antes de iniciar una relación ¿cómo ha sido nuestra amistad?¿Qué me gusta de la persona con quien quiero estar?¿Estaré contento si no logro conseguir una pareja y deba permanecer soltero por más tiempo?¿Me siento confiado con respecto a mi apariencia física?¿Estoy dispuesto a mantener una buena comunicación con mi pareja?¿Cómo reacciono ante las discusiones y problemas?¿Entiendo que tener una pareja no significa adquirir una posesión material?¿Tengo expectativas realistas con respecto a cómo debe funcionar una relación sentimental?¿Soy celoso? ¿En qué medida? ¿Qué puedo hacer para mejorar en esta área?¿Me conozco y estoy a cargo de mis emociones y sentimientos?¿Me enamoro con facilidad? ¿Qué puedo hacer para cambiar esta situación?¿Seré sincero y no aparentaré ser alguien quien no soy solo para agradarle a alguien?¿Cuál es mi nivel de madurez?¿Soy capaz de hablar sobre temas serios con mi futura pareja?¿Soy independiente en todos los aspectos?¿Estoy dispuesto a dedicar tiempo a mi pareja?¿Puedo aceptar a otra persona sin intentar cambiar su forma de ser?¿Soy controlador o comprensivo?¿Estoy buscando a la persona perfecta o entiendo que todos tenemos virtudes y defectos?¿Acepto los consejos de otros de buena gana y los pongo en práctica?¿Me imagino presentando a mi futura pareja a mis familiares y amigos?¿Conozco mi lenguaje de amor?
*1 Corintios 13:4-7 (Nueva Traducción Viviente).

Fuente: cvclavoz.com

Me tienen que volver a recordar


Me tienen que volver a recordar
 
¿Eres de las personas que olvidan fácilmente? A veces estar distraído u ocupado permite que olvides con facilidad muchas cosas como: comprar un ingrediente de tu receta, llamar a alguien, apagar la cocina o la luz, el trabajo o celular que necesitabas llevar; todas esas son  situaciones que pueden pasar por alto,  pero existen cosas que nunca debes olvidar.
En una ocasión una anciana se perdió en la ciudad, justamente una de sus vecinas la vio subirse en una movilidad equivocada y corrió para ayudarla a volver a casa. Esta viejita menciona que cada vez que tiene que tomar movilidad recuerda la bondad de su vecina y en lo posible trata de pagarle llevándole algún alimento. No necesita que le recuerden porque está muy agradecida ¿Te tienen que recordar lo buenos que han sido contigo?
Cuídate de no olvidarte de Jehová tu Dios, para cumplir sus mandamientos, sus decretos y sus estatutos que yo te ordeno hoy; no suceda que comas y te sacies, y edifiques buenas casas en que habites, y tus vacas y tus ovejas se aumenten, y la plata y el oro se te multipliquen, y todo lo que tuvieres se aumente; y se enorgullezca tu corazón, y te olvides de Jehová tu Dios, que te sacó de tierra de Egipto, de casa de servidumbre; que te hizo caminar por un desierto grande y espantoso, lleno de serpientes ardientes, y de escorpiones, y de sed, donde no había agua, y él te sacó agua de la roca del pedernal; que te sustentó con maná en el desierto, comida que tus padres no habían conocido, afligiéndote y probándote, para a la postre hacerte bien; y digas en tu corazón: Mi poder y la fuerza de mi mano me han traído esta riqueza.
Sino acuérdate de Jehová tu Dios, porque él te da el poder para hacer las riquezas, a fin de confirmar su pacto que juró a tus padres, como en este día. Mas si llegares a olvidarte de Jehová tu Dios y anduvieres en pos de dioses ajenos, y les sirvieres y a ellos te inclinares, yo lo afirmo hoy contra vosotros, que de cierto pereceréis. Deuteronomio 8:11-19
El tiempo de la bendición de Dios había llegado, por tanto el Señor se preocupa y da una  palabra de advertencia a su pueblo, el verbo "Cuídate" se traduce como “guardar”, “observar”, “hacer cuidadosamente”; es decir, les dice: “cuando la bendición llegue a tu vida ten mucho cuidado de no olvidarte de Dios y lo que hizo por ti”.
A veces la comodidad y la satisfacción también pueden hacernos olvidar aspectos importantes como la voluntad de Dios para nuestra vida. Por lo cual Él advierte que existen consecuencias serias por la desobediencia así como grandes beneficios por la obediencia.
En este momento te animo a recordar lo que Jesús hizo por ti en la cruz al salvar tu vida, y además lo sigue haciendo con cada bendición que te tiene  preparada en este mundo. Si estás con una aflicción la respuesta de Dios llegará en el tiempo preciso si permites que Él tome el control pero, si te encuentras en un tiempo de bendición ¡acuérdate!, no esperes volver a recordar a Dios por medio de la aflicción.

Fuente:  Shirley Chambi CVCLAVOZ

Invítalo a tu casa


Invítalo a tu casa

Y el arca de Dios estuvo con la familia de Obed-edom, en su casa, tres meses; y bendijo Jehová la casa de Obed-edom, y todo lo que tenía. (1 Crónicas 13:14).
La Biblia nos cuenta la historia de un hombre llamado Obed – edom, a quien se le concedió el gran privilegio de que pudiera tener el arca en su casa. Como sabemos el arca es un símbolo de la presencia de Dios, por lo tanto cuando Obed - edom abrió su casa para guardar el arca, lo que realmente hizo fue invitar a la presencia de Dios a que entrare y permaneciere en su hogar. Dice la Biblia que por causa del arca Dios bendijo a Obed – edom y todo lo que él tenía.
El ejemplo de la mujer sunamita también puede inspirarnos en el mismo sentido. “Yo te ruego que hagamos un pequeño aposento de paredes, y pongamos allí cama, mesa, silla y candelero, para que cuando él viniere a nosotros, se quede en él.” 2ª de Reyes 4:10
Esta mujer rápidamente se dio cuenta que el que pasaba a menudo por su casa, no era un hombre común y corriente sino un varón de Dios. No sólo que no se conformó con el trato habitual que pudieran tener de un saludo o compartir una comida, sino que le propuso a su esposo hacer un aposento para él, un lugar en el que pudiera quedarse.
Esta mujer estaba determinada a que la bendición no pasara de largo sino que se quedara en su casa y por causa de esta sabia decisión, al año siguiente dio a luz un hijo, siendo estéril y su marido de avanzada edad.
Llevando estos pasajes a nuestras vidas pudiéramos decir: ¡que importante es abrir nuestra casa y nuestro corazón para permitir la entrada de la presencia de Dios! Porque donde Él está, todo prospera, revive y toma nuevas fuerzas. En su presencia hay plenitud de gozo, hallamos paz y solución a cuestiones que humanamente nos parecían imposibles de resolver
Cuando dejas entrar la presencia de Dios en tu casa, Él lo cambiará todo. Pero para esto, es necesario estar dispuestos a que Dios pueda hacer cambios en nuestras vidas, dejar de tener nosotros el control, para que sea Él quien lo tenga. Te animo en este día, a que lleves la presencia de Dios a tu vida y a tu casa, búscalo como nunca antes y verás que al igual que Obed –edom y la mujer sunamita, todo será bendecido por su presencia.
Fuente:  Daniel Zangaro  CVCLAVOZ

Lleva tu paraguas


Lleva tu paraguas
 
En un pueblito de zona rural se produjo una larga sequía que amenazaba con dejar en la ruina a todos sus habitantes, debido a que todos era agricultores. A pesar de que la mayoría de sus habitantes eran creyentes, ante la situación límite marcharon a ver al párroco y le dijeron:
- Si Dios es tan poderoso, pidámosle que envíe la lluvia necesaria para revertir esta angustiante situación.
- Está bien – respondió el clérigo-  le pediremos al Señor, pero deberá haber una condición indispensable.
- Díganos, ¿cuál es? -  respondieron todos.
- Hay que pedírselo con fe, con mucha fe, contestó el sacerdote.
- ¡Así lo haremos, y también vendremos a la iglesia todos los días!
Los campesinos comenzaron a ir a los servicios todos los días, pero las semanas transcurrían y la esperada lluvia no se hacía presente.
Un día fueron todos a enfrentar al sacerdote y reclamarle:
- Usted nos dijo que si le pedíamos con fe a Dios que enviara lluvia, Él iba a acceder a nuestras peticiones. Pero ya van varias semanas y no obtenemos respuesta alguna.
- ¿Han ustedes pedido con fe verdadera?
- ¡Sí, por supuesto! -  respondieron al unísono.
- Entonces, si dicen haber pedido con fe verdadera, ¿por qué durante todos estos días ni uno solo de ustedes ha traído el paraguas?
La fe no consiste sólo en pedir y esperar, debemos ponernos en acción, confiando en que Dios obrará, creyendo en que lo que hemos pedido ya es un hecho.
“Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”. Hebreos 1:1.
Dios es fiel y cumple sus promesas, sólo espera que le creamos con todo el corazón, que no haya lugar para ninguna duda.
Fuente: Ana María Frege Issa CVCLAVOZ

Adulterio virtual


Adulterio virtual
 
“¿Andará el hombre sobre brasas Sin que sus pies se quemen? Así es el que se llega a la mujer de su prójimo; No quedará impune ninguno que la tocare”. Proverbios 6: 20-29
El adulterio trae destrucción familiar, no sólo afectando al matrimonio sino también a los hijos que son quienes terminan experimentando un gran dolor como consecuencia de los errores de sus padres.  Lo primero que se pierde en este tipo de situaciones es la confianza y justamente esta es una de las cosas mas difíciles de recuperar, aunque como sabemos, no hay nada imposible para Dios.
Por lo cual y siendo conscientes de las devastadoras consecuencias del adulterio creo que es importante estar alerta contra los lazos de pecado con los cuales el enemigo nos quisiera atrapar. Resulta alarmante ver como personas casadas coquetean con sus compañeros de trabajo, permitiendo ciertas conversaciones íntimas en las cuales abren sus corazones compartiendo anhelos, problemas, temores o preocupaciones. Esto espiritualmente significa abrirle la puerta al pecado y a todas sus consecuencias o como bien nos enseña el proverbio citado: no se puede caminar sobre las brasas sin quemarse.
Pero también hay algo que está teniendo mucho auge y es lo que podríamos denominar el "adulterio virtual".  Esto sucede cuando por medio del chat o las redes sociales las conversaciones pasan a ser cada vez más frecuentes e íntimas lo cual lleva a que con el tiempo se terminen involucrando sentimentalmente.  En la comparación “la pareja virtual” pareciera ser más comprensiva y atractiva que el cónyuge, por lo que gradualmente se comienza a dedicar más tiempo a estas conversaciones y luego hasta podrían querer concretar físicamente la relación.
El hecho de que sea algo virtual, no quita la esencia de pecado de este tipo de situaciones, ya que para cometerlo no hace falta concretarlo físicamente, la Biblia dice: “Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón”. Mateo 5:28.
A veces se trata de compensar la falta de comunicación en el matrimonio con las conversaciones virtuales, lo cual hará que con el tiempo cada uno de los esposos permanezca en su mundo. Quizás vivan en la misma casa,  pero en la práctica habrá una distancia que los separa y que lamentablemente cada día se hace mayor.
Por lo tanto, no podemos ser tan livianos como para permitirnos ciertas cosas, como mirar lo que no se debe, compartir nuestra intimidad o abrir el corazón dando lugar a situaciones ambiguas. Las consecuencias de permitir todo esto suelen ser nefastas. El mejor consejo sería huir de este tipo de tentaciones, tal como lo hizo José cuando fue tentado con la esposa de Potifar. Porque de dar lugar a la tentación, tal vez se llegue a un punto donde la resistencia pudiera resultar casi imposible.
Nadie adultera de un momento para otro, generalmente se va concibiendo la idea, los filtros que antes impedían hacer o decir ciertas cosas ya no funcionan y primero se produce un adulterio a nivel de la mente, luego la idea va creciendo y finalmente dará a luz al pecado.
Por lo tanto, es necesario ser muy cuidadosos con lo que vemos y con las ideas y pensamientos que dejamos que hagan nido en nuestra mente. Te animo a que tomes la decisión de guardar tus pensamientos de manera que ellos no se vuelvan incontrolables. La Biblia nos da un gran consejo acerca de lo que debemos pensar:
“Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad”.

Fuente:  Daniel Zangaro CVCLAVOZ

Te daré lo mejor


Te daré lo mejor
 
En cierta ocasión un ganadero y un pastor  hicieron algunos acuerdos para intercambiar un grupo de sus respectivos rebaños con el fin de diversificar y ampliar más sus negocios. Por un lado,  el ganadero obtendría la lana de las ovejas y el pastor, por su parte,  ya tendría algunas vacas para comercializar con la leche que recibiría de ellas.
Hicieron los acuerdos y ambos se sentían satisfechos, pero el ganadero no quería dejar ir a dos de sus mejores vacas lecheras, así que previo a la transacción, secretamente las cambió por otras dos vacas que eran un poco flacas y daban leche agria.
Al día siguiente ambos hicieron el trueque y todo parecía estar bien, pero por la noche de ese mismo día el ganadero no podía dormir. Dejó volar su imaginación y empezó a temer que el pastor también había intercambiado a dos o más de sus mejores ovejas, dejándolo con algunas que estaban enfermas o algo peor. A la mitad de la noche se levantó para verificar su nuevo rebaño y aunque parecía que todo estaba bien, no podía dejar de pensar que de alguna manera él también había sido estafado. 
Esto en psicología se llama proyección. Básicamente se trata de un mecanismo de defensa mental mediante el cual una persona atribuye a otros los sentimientos, pensamientos o impulsos propios que niega o le resultan inaceptables para sí mismo. Este mecanismo se pone en marcha en situaciones de conflicto emocional o cuando uno se siente amenazado interna o externamente.
Por esta razón, quien miente cree que todos le mienten y quien roba cree que todos le roban. Alguna vez oíste la frase: “Lo que vemos en los demás nos dice mucho de nosotros mismos”, pues la proyección psicológica tiene mucho que ver con eso. Lo terrible de todo esto  ocurre cuando también involucramos a Dios en estas sensaciones.
Muchas veces pasa que nosotros no creemos que Dios nos esté dando lo mejor de sus bendiciones, que no nos está dando aquello que realmente merecemos y que no estamos recibiendo lo que es justo.
Efesios 2:4-7 dice: “Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús, para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús.” Versión Reina-Valera 1960    
Este versículo muestra la gran bondad de Dios en darnos juntamente con Cristo todo lo que Él tiene: No sólo nos salvó, sino también nos hace coherederos del reino. Entonces, cuando Dios nos dice a través de su palabra que quiere darnos lo mejor, realmente se está refiriendo a lo mejor.
Todos recibimos bendiciones de su parte: algunas satisfacen nuestra vida y nos llenan de paz, pero otras, aunque  parecen malas circunstancias, se convierten en herramientas para ayudarnos a crecer en la fe.
¿Crees que Dios no te está dando lo mejor?, quizás sea una alerta de tu propio subconsciente, poniendo en evidencia que tú mismo no le estás dando lo mejor de ti a Dios.
Fuente: Hector Colque CVCLAVOZ

miércoles, 23 de noviembre de 2016

¿Cuándo nadie me ve?



¿Cuándo nadie me ve?

Ananías y Safira tenían un plan, vender su tierra y dar un porcentaje de la venta para la obra de Dios, pero en algún momento decidieron esconder la verdad y trataron de engañar a Dios y a Pedro y esto les costó la vida.
Muchos tenemos la falsa de idea de que podemos esconder cosas importantes o vergonzosas, creemos que nadie sabe lo que pasó porque no hubo una persona presente cuando sucedió el hecho. Es fácil engañar a las personas pero debes recordar que uno de los atributos de Dios es que es “omnipresente”, es decir que aunque no lo veas Él está ahí viéndote.
Proverbios 15:3 dice: Los ojos del Señor están en todo lugar, vigilando tanto a los malos como a los buenos” (NVT), entonces cuando uno piensa que puede hacer cosas indebidas porque nadie lo sabrá está muy equivocado porque Dios es testigo de cada acción.
Muchos hemos oído decir “tarde o temprano todo se sabrá” y cuán ciertas son estas palabras y la Biblia misma registra esta verdad, “No hay nada escondido que no llegue a descubrirse, ni nada oculto que no llegue a conocerse públicamente” Lucas 8:17 (NVT)
Cada vez que te encuentres frente a una decisión entre hacer lo malo y vergonzoso o hacer lo correcto, recuerda que Dios está viéndote y que no podrás sostener esa mentira por mucho tiempo, piensa, reflexiona y decide por aquello que no te traerá vergüenza en un futuro.

Fuente: Judith Quisbert CVCLAVOZ

La Escuela del Maestro


La Escuela del Maestro

Cuentan que a un pastor convaleciente de una grave enfermedad, uno de los miembros de su congregación le hizo la siguiente observación: “Señor, aunque Dios lo acabe de sacar de las puertas de la muerte, nos tememos que necesitará usted bastante tiempo antes de poder recuperar su vigor usual y tener la mente lo bastante clara para poder predicar como antes”.
El hombre de Dios le respondió: “Está usted equivocado, mi amigo, en estas seis semanas de enfermedad he aprendido más de Dios, que por mis estudios y todos mis años de ministerio, y espero predicar ahora con su ayuda, no lo que he leído en libros, sino lo que Él me ha enseñado en su Escuela Particular”
Todos pasamos por la escuela de Dios, con algunas materias más difíciles que otras en determinados momentos, y es nuestro deber pasar la prueba que nos da, lo que solamente se puede lograr aprendiendo la lección cuando lo conocemos de forma personal y vivencial.
No sé qué es lo que Dios quiere enseñarte,  quizás estés en la misma situación de este pastor y estés enfrentando una enfermedad, o posiblemente tengas deudas o falta de empleo, quizás eres víctima de una injusticia o la soledad te está atormentando, posiblemente te equivocaste y sientes que le fallaste a Dios. No importa cuál sea tu situación, Dios quiere manifestarse en tu vida y enseñarte que Él es Jehová-Jireh (Proveedor), Jehová–Rafa (El Señor que Sana), Jehová-Nissi (Nuestro estandarte),  Jehová–Tsidkenu (Nuestra justicia), Jehová–M’kaddesh (El que Santifica), Jehová–Shalom (El Señor es nuestra paz) y podríamos seguir con los nombres de Dios porque Él es todo lo que necesitamos.
Nuestro Padre  puede suplir cada necesidad que tenemos pero no tendría sentido que Él nos diera todo como si se tratara de un genio cumpliendo deseos. Lo que Dios busca es que lo conozcamos personalmente y muchas veces para esto tenemos que pasar por valles de sombras, por tiempos duros que incluso llegan a carecer de sentido para nosotros. Pero es justamente ahí, cuando somos vulnerables, que Dios puede trabajar en nosotros y manifestarse en nuestras vidas con su poder.
Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces”. Jeremías 33:3 (RVR1960)
No sé cuál es  la lección por la que estás pasando ni el tiempo que llevas ahí pero Dios no se ha alejado de ti ni un minuto y tiene aquello que necesitas. Confía en Él y búscalo porque este tiempo es para eso, para que lo conozcas más.
Dios es el mejor Maestro y a lo largo de nuestras vidas pasamos por una escuela particular en la que va perfeccionándonos y, al mismo tiempo, nos permite  conocerlo de forma más  personal.

Fuente:  Ana María Frege Issa CVCLAVOZ

lunes, 21 de noviembre de 2016

¿Con quién realizas tus planes?


¿Con quién realizas tus planes?
 
Josafat era rey de Judá, un hombre que hacía lo recto ante los ojos de Jehová, pero tuvo un problema: “hizo alianzas con personas impías y malvadas”,  uno de ellos fue el rey Acab de Israel, un personaje vil que casó a su hijo con su hija y no quitó los altares altos por lo cual permitió la idolatría en el pueblo de Dios.
Josafat rey de Judá trabó amistad con Ocozías rey de Israel, el cual era dado a la impiedad, e hizo con él compañía para construir naves que fuesen a Tarsis; y construyeron las naves en Ezión-geber.
Entonces Eliezer hijo de Dodava, de Maresa, profetizó contra Josafat, diciendo: Por cuanto has hecho compañía con Ocozías, Jehová destruirá tus obras. Y las naves se rompieron, y no pudieron ir a Tarsis. 2 Crónicas 20:35-37
También se unió a Ocozías, hijo de Acab, para hacer negocios construyendo una flota de barcos que iban a partir a Tarsis en busca de oro. Sin embargo, el profeta Eliezer le advirtió a Josafat que las naves serían destruidas. Así, los barcos se rompieron y no pudieron ir a Tarsis.
Josafat invirtió dinero y energía en algo que Dios no respaldo, planificó proyectos con personas que no eran del agrado del Señor, por lo cual sus obras fueron destruidas. ¿Tienes planes o proyectos a corto o largo plazo? Es necesario involucrar a Dios en ellos si deseas que estos sean prosperados.
Mas Jehová estaba con José, y fue varón próspero; y estaba en la casa de su amo el egipcio. Y vio su amo que Jehová estaba con él, y que todo lo que él hacía, Jehová lo hacía prosperar en su mano. Génesis 39:2-3
Josafat empezó haciendo la voluntad de Dios por lo que inicialmente fue bendecido, pero se dejó influenciar  negativamente por las personas que lo rodeaban  y se apartó de Él.
Es importante analizar con quién realizas tus planes o con quiénes pasas la mayor parte de tu tiempo, es posible que estés realizando obras que al final no llegarán lejos porque te están apartando de la voluntad de Dios. Examina tu vida y responde si los planes que tienes para este día, para mañana o de aquí a unos años son del agrado de nuestro Padre Dios, porque sólo así serás prosperado.

Fuente:  Shirley Chambi CVCLAVOZ

LOS QUE SE VENDEN A SI MISMOS



"LOS QUE SE VENDEN A SI MISMOS"

Hay tres conceptos, que todos los cristianos (especialmente los que ejercemos un liderazgo) debiéramos considerar y la coherencia entre estos tres, reflejarían nuestra verdadera honestidad como cristianos:

1) ¿Como cree y piensa la gente que soy?
2) ¿Como pienso, que la gente cree que soy?
3)¿Como soy realmente?

El conflicto aparece cuando estos tres conceptos están disociados totalmente.
Suele suceder habitualmente en nuestras sociedades, la imagen que "vendemos", como creo que los demás me compran esa imagen, y la realidad.
El mundo se mueve en un sistema marketinero, se acomodan los productos en las vidrieras y las góndolas, de tal forma que se vendan, que entre por los ojos, hasta existe toda una capacitación y asesoramiento para la imagen, la publicidad, la presentación, hasta los envases, que generalmente no se condicen con la realidad.
Esto es nefasto cuando se introduce en la Iglesia, porque significa la pérdida de autenticidad, autenticidad significa básicamente, ser como se es.
En las personalidades, en los testimonios personales, en el carácter  que queremos mostrar, (cuando vendemos)  hay mucha fábula y poca realidad, esto es "construir" algo prefabricado, más tarde o más temprano se derrumbará.

 Jesús nunca estuvo preocupado por su imagen, si algo distinguió al Señor fue su autenticidad, si, el se preocupaba porque le conocieran como Salvador y Señor, y no creyeran que era un revolucionario, un profeta, o algún iluminado de turno, así se debe interpretar aquella oportunidad en que el le preguntó a sus discípulos:

"...preguntó a sus discípulos, diciendo: ¿Quien dice los hombres que es el Hijo del hombre?...¿Y vosotros, ¿Quien decís que soy yo?" (Mateo 16: 13-16)

Hay un don que los líderes no debemos ni subestimar, ni ignorar, es dado por el Espíritu Santo y se llama "discernimiento", y como los dones no son monopolizados por nadie, ni son patrimonio de ninguno, Dios reparte como quiere y en quien quiere, en las congregaciones y en el pueblo de Dios, muchos hermanos comunes, (de la congregación) lo poseen.
No subestimes la congregación, algunos se "compran" el buzón, otros nunca.
El discernimiento espiritual revela las intenciones de los corazones, muestra lo que el ojo no ve, con la revelación del discernimiento no funcionan las "caretas", Dios muestra la realidad, el tercer item.
Todos los cristianos debieran pedirle a Dios, para estos últimos tiempos, el don de discernimiento espiritual.

Es decir que si vives queriendo sostener algo que no eres, muchos se darán cuenta, en el mundo comercial y empresarial podría funcionar, pero nunca en la Iglesia, en las bancas, en los rincones de la congregación hay hermanos que lo descubriran.
En verdad los líderes debieran ser genuinos, con sus virtudes y defectos, es muy trabajoso mantener una imagen "prefabricada", es tan desgastante vivir pendiente de lo que los demás piensan de mi, mas cuando esa imagen "prefabricada", tiene la "altura" de la imagen de la estatua de Nabucodonosor:

"El rey Nabucodonosor hizo una estatua de oro cuya altura era de sesenta codos (treinta metros)  y su anchura seis codos (tres metros); la levantó en el campo de Dura, en la provincia de Babilonia...y cualquiera que no se postre y adore..." (Daniel 3:1  y  6)

Y dije la altura, porque cuanto más alta, más trabajoso de mantener en pie.

El hombre cuando viene a Cristo es liberado de la idolatría, abandonar la idolatría es sencillo, el conflicto está en la egolatría, la idolatría del ego, la idolatría a la personalidad, son aquellos que no pueden conciliar estos tres conceptos.
Para identificar a un ególatra, basta observar, son aquellos que se preocupan más por la opinión de la gente, y de sus pares, que de la opinión de Dios.

"Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo" (Gálatas 1:10)

Todos debiéramos ser coincidentes, con lo que la gente piensa de mi y como soy realmente, sino coincidente también con el concepto que Dios tenga acerca de mi, eso se llamaría alguien autentico.

Fuente: Pastor Sergio Gebel

domingo, 20 de noviembre de 2016

¡No me soltarás!


¡No me soltarás!


“Aun cuando yo pase por el valle más oscuro, no temeré, porque tú estás a mi lado. Tu vara y tu cayado me protegen y me confortan” Salmos 23:4 NTV
El doctor Alfonso debía entregar medicamentos al único centro de salud de un pequeño pueblo alejado de la ciudad; en el último tramo antes de llegar, debía caminar por un estrecho y peligroso sendero que rodeaba la montaña,  no podía detenerse ya que quería aprovechar la luz del día para llegar a su destino final, esa era su meta.
Sin embargo, una pequeña piedra hizo que resbalara hacia el vacío, pero instintivamente reaccionó agarrándose de una raíz que sobresalía, pensó ¿Qué hago? ¿Quién me ayudará si no vi a nadie en todo el camino? Entonces gritó insistentemente: ¡Dios ayúdame, Dios ayúdame!, pero la única respuesta que oía era sólo el silbido del viento.
Estaba agotado y su mano ya no aguantaba más el peso de su cuerpo, así que con gran desesperación pensó en dejarse caer al vacío.  Pero en ese instante alguien lo tomó fuertemente de la mano y entre jalones le arrastró hasta el borde del sendero. Era un hombre robusto de piel canela, habitante del pueblo al cual se dirigía y que lo había estado vigilando todo el camino de manera silenciosa, porque era conocedor de los peligros de la zona. Su silencio y su intervención oportuna salvaron al doctor de un fatal desenlace.
Dios conoce muy bien nuestros caminos, los peligros, las complicaciones y los retos que afrontamos. Tengamos por seguro que el Señor está siempre atento, para que cuando lo necesitemos Él venga en nuestro socorro a tomarnos de la mano. Nunca llega tarde ni se distrae, sino que está mirándonos con la misma atención con la que un padre observa a su hijo cuando está aprendiendo a caminar.
Aunque andemos en valles obscuros o si estamos en calma Dios está con nosotros, no hay nada ni nadie que nos aleje de su presencia. Su mano está ahí para sacarnos una y otra vez y traernos de vuelta al camino.
“No me soltarás en la calma o la tormenta” dice una conocida canción, y esto es tan cierto que lo podemos comprobar día a día
“Ciertamente tu bondad y tu amor inagotable me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa del Señor viviré por siempre.” Salmos 23:6 NTV

Fuente: Soraida Fuentes  CVCLAVOZ

Nada me faltará


Nada me faltará

“Jehová es mi pastor; nada me faltará.” Salmo 23:1
Qué hermoso es leer este salmo y saber que tenemos un Pastor en quien podemos encontrar todo lo que necesitamos.
Dios promete que nada nos faltará porque Él nos pastorea. Eso quiere decir que Él hace un trabajo de Pastor todos los días con nosotros. Nos cuida de peligros, nos guía por los mejores caminos, nos fortalece, nos ama, y cuando fallamos nos disciplina. Y es que nuestro Dios es tan lindo con nosotros que nos ha dejado esa promesa para que nunca desconfiemos de Él.
Pero, por otro lado, Jesús dijo que Él sabe quiénes son sus ovejas porque las conoce, éstas oyen su voz y lo siguen,  Él les da vida eterna y ellas no perecen jamás… nadie puede arrebatarlas de su mano porque su Padre se las dio y nadie puede arrancar nada de las manos del Padre. Juan 10:27-29. La realidad es que aunque digamos que Jehová es nuestro Pastor, si no escuchamos su voz y no le seguimos, entonces somos ovejas descarriadas o sencillamente no somos parte de su rebaño. La buena noticia es que podemos pasar a ser una de sus ovejas aceptando Su sacrificio en la cruz, confesándolo como Señor y Salvador y reconociendo que Dios lo levantó de entre los muertos Romanos 10:9.
Y si estamos descarriados, la Biblia dice que “el Buen Pastor” vino precisamente a buscar aquella oveja perdida y que se regocija más por aquella rescatada que por las miles de ovejas que aún están en su rebaño. Sólo tenemos que detenernos, escuchar su voz y seguir sus instrucciones.
“Porque el Hijo del Hombre ha venido para salvar lo que se había perdido. ¿Qué os parece? Si un hombre tiene cien ovejas, y se descarría una de ellas, ¿no deja las noventa y nueve y va por los montes a buscar la que se había descarriado? Y si acontece que la encuentra, de cierto os digo que se regocija más por aquélla, que por las noventa y nueve que no se descarriaron.” Mateo 18:11-13.
Nada te faltará si Jesús está en tu corazón y empiezas a vivir conforme a Su palabra. Dios sabe qué necesidades tienes y las suplirá en su momento. Filipenses 4:19 nos dice “Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús”.
“Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida…” Salmo 23:6.

Fuente: Diego  Jora  CVCLAVOZ

sábado, 19 de noviembre de 2016

La capacidad de disfrutar


La capacidad de disfrutar

“Hay un mal que he visto debajo del cielo, y muy común entre los hombres: El del hombre a quien Dios da riquezas y bienes y honra, y nada le falta de todo lo que su alma desea; pero Dios no le da facultad de disfrutar de ello, sino que lo disfrutan los extraños. Esto es vanidad, y mal doloroso.” Eclesiastés 6:1-2.
En estos días leí una historia que me llamó mucho la atención. Relataba la vida de un hombre de Vermont, llamado Ronald Read, a quien solían ver caminando por las calles de la ciudad, siempre con un abrigo viejo, roto y desteñido. Este hombre trabajó muchos años limpiando en una gasolinera y luego realizó la misma tarea para una conocida e importante tienda de la ciudad. Los que conocían a este hombre decían que era capaz de dejar su precario auto a bastante distancia de los lugares a los que iba, solo para no tener que pagar el estacionamiento.
Desconcertaba a sus conocidos el hecho de ver a Ronald cada día leyendo un ejemplar del “Wall Street Journal”, ya que era notoria y evidente su pobreza, pero pensaron que se trataba de alguna manía relacionada con su edad.
Ronald falleció en Junio del 2014 a la edad de 92 años dejando una fortuna de 6 millones de dólares. Este dinero por indicación suya fue donado a la biblioteca y al hospital de su ciudad. Ni siquiera su propio hijo conocía acerca de la riqueza de Ronald, la cual había sido forjada por su increíble habilidad para operar en la compra y venta de acciones bursátiles.
Era millonario pero vivía como un pobre necesitado y aunque algunos llamarán a esta actitud como humildad, la realidad es que este hombre fue incapaz de disfrutar lo que fue el fruto de tanto esfuerzo y su extraordinaria habilidad para operar en la bolsa.
La Biblia nos enseña que no es bueno amontonar como lo hace el avaro que ama el dinero, no por lo que puede obtener con él, sino por el solo hecho de poseerlo.  ya que hace un dios de sus riquezas. En el caso opuesto encontramos a las personas que buscan llenar vacíos comprando todo lo que desean, sin embargo al poco tiempo continúan con el sentimiento de insatisfacción que no pudieron llenar con el consumismo.
Pero también es cierto que fuera de estos casos extremos a veces no sabemos o no nos permitimos disfrutar lo que Dios nos quiere dar. Por eso,  no depende tanto de cuanto tenemos sino del contentamiento que podemos lograr con nuestra vida y lo agradecido que estamos en cuanto a lo que Dios nos quiere dar.
Aunque la historia está enfocada en lo económico, su aplicación puede ser mucho mas amplia.
Existen personas que no pueden disfrutar del descanso, sienten culpa de tomar vacaciones o pasar un tiempo haciendo algo que realmente les gusta, o de comprarse algo que no es estrictamente necesario pero que le gustaría tener.
¡Que decir de aquellos que no pueden parar con sus ocupaciones para disfrutar un precioso y necesario tiempo de familia!. La realidad es que mucho podemos intentar por satisfacer nuestros deseos pero es Dios quien nos da la capacidad de disfrutar.
Pienso que nadie quieres ser el hombre del texto bíblico citado, ni tampoco el excéntrico Ronald de la historia, ambos tenían riquezas que no pudieron disfrutar y otros se terminaron beneficiando de ellas. Tenemos la enseñanza del apóstol Pablo que sabía contentarse en toda situación: “No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación. (Filipenses 4:11)”.
Por lo tanto, creo que hoy es una gran oportunidad para ser agradecido con Dios por todas las bendiciones recibidas de su mano y también para pedir con toda humildad: Señor dame la capacidad para disfrutarlas.

Fuente: Daniel Zangaro CVCLAVOZ

viernes, 18 de noviembre de 2016

Honor


Honor

En el año 794 d.C. en Japón, emergió un grupo de guerreros altamente disciplinados conocidos como soldados Samurái. Ellos  eran expertos en el uso de la espada y en el domino de las artes marciales, y aunque al principio no servían a ninguna persona en particular, con el tiempo se convirtieron en la Guardia real del Emperador.
Por aquella época, el país del sol naciente estaba empezando a establecer las bases de su cultura, costumbres, literatura, arquitectura y de todo lo que ahora conocemos de ellos. En este crecimiento paulatino, un hombre se levantó como líder del imperio, pero paralelamente habían algunos clanes poderosos de familias que buscaban quedarse con poder total.
Los clanes más poderosos buscaban guerreros e incluso mercenarios que podían unirse a su causa por una cantidad de dinero, pero entre ellos surgieron algunos hombres que luchaban por algo mucho más importante que el poder o las riquezas. Poco a poco ellos fueron uniendo diferentes técnicas de pelea, tendencias filosóficas orientales y religiosas hasta crear su propio código. 
Los Samurái vivían bajo una ley cuyas virtudes principales eran: justicia, coraje, benevolencia, respeto, cortesía, honestidad, sinceridad absoluta, honor y lealtad. Estos hombres pusieron orden al imperio Japonés ya que tenían un alto respeto por la vida y no cualquiera podía enfrentarse a ellos. Hasta el día de hoy los soldados Samuráis son reconocidos por su esplendorosa armadura,  por su espada y sobre todo, por su honor. Lamentablemente hoy no se oye hablar mucho de esa cualidad.
Sin embargo, podemos encontrar en 1 Samuel 2:30 dice: “Por tanto, Jehová el Dios de Israel dice: Yo había dicho que tu casa y la casa de tu padre andarían delante de mí perpetuamente; mas ahora ha dicho Jehová: Nunca yo tal haga, porque yo honraré a los que me honran, y los que me desprecian serán tenidos en poco.” Versión Reina-Valera 1960 
“¡Honrare a los que me honren!” dice el texto, pero ¿Cómo podemos honrar a Dios? El diccionario define la palabra honor como una cualidad que impulsa a una persona a actuar rectamente, cumpliendo su deber de acuerdo con la moral. Sabemos que nuestra conducta debe estar regulada por lo escrito en la Biblia, entonces podemos decir que honramos a Dios cumpliendo sus leyes y mandamientos.
¿Sabías que cuando un Samurái se deshonraba a sí mismo o a su clan, podía recuperar su honor suicidándose?  Desde luego nosotros no haremos esto, aunque sí hubo alguien que tuvo que morir para que nosotros tengamos una nueva oportunidad al cometer una falta o un error. Él es Jesús.
Corónate de honor y cumple los mandamientos escritos en la Biblia aunque nadie lo note. Con seguridad Dios sí te está viendo y está listo para honrarte como paga a haberlo honrado a Él. 

Fuente: Héctor Colque CVCLAVOZ

"VIOLENCIA DE GÉNERO"



"VIOLENCIA DE GÉNERO"
Un fenómeno creciente de los últimos tiempos.

Argentina es el quinto país en ranking mundial de femicidios, muere una mujer cada 30 horas, se contabilizan más de 50 ataques sexuales por día, en el 2015 hubo 3746 violaciones, los expertos dicen que 7 de cada 10 mujeres son asesinadas por su círculo íntimo.
Aquí se realizaron dos convocatorias multitudinarias bajo la consigna: "Ni una menos" en Junio del 2015 y en Junio del 2016.
Las mujeres son víctimas de hostigamiento, aislamiento, manipulación, golpes, maltratos psicológicos y físicos, restricciones al libre movimiento, impedimento para disponer de sus bienes, obligación de mantener relaciones sexuales contra su voluntad, acoso laboral, sexual, amenazas verbales, etc.
Lo curioso es que el hombre solo ejerce este tipo de violentación contra la mujer, no lo hace contra un conocido, un amigo o su jefe, generalmente son hombres muy cobardes para enfrentarse con un par, su "machismo" solo se echa de ver con las mujeres. (y de puertas adentro)
Luego generalmente se arrepiente del hecho, pide perdón, llora y promete que nunca volverá a suceder, las mujeres terminan aceptando y haciéndose adictas a ese momento.
Y lo más grave es, que muchas mujeres naturalizan estos tipos de violencia, ("el no es malo"..."Sucede que yo lo saco"..."me prometió que va a cambiar")
Escuchamos tantas veces los mismos argumentos en las consultas pastorales.
Las causas han sido estudiadas por sociólogos, psicólogos, y expertos en familia, algunos me pedían que abordara esta problemática a la luz de las Escrituras.
Cuando Dios creó la primera pareja humana, por causa de la desobediencia y por ser Eva quién cede a la tentación y luego convence a su marido, la mujer queda bajo "autoridad" de su esposo:

"Porque no permito a la mujer...ejercer dominio sobre el hombre...Porque Adán fue formado primero, después Eva, y Adán no fue engañado, sino que la mujer, siendo engañada, incurrió en transgresión" (1 Timoteo 2:12-14)

"Pero quiero que sepáis que Cristo es la cabeza de todo varón, y el varón es la cabeza de la mujer, y Dios es la cabeza de Cristo" (1 Corintios 11:3)

Ser la "cabeza" no significa ser quien manda, quien ordena, tampoco significa un lugar de superioridad, por el contrario se entiende como un rol de responsabilidad, de ser quien protege, quien provee, quien defiende, por esa misma razón cuando Dios considera que no era bueno que el hombre estuviera solo, y crea a la mujer, pone en sueño al hombre y toma una de sus costillas para crearla, de su costado, cerca de su corazón, de "su lado", para ser su ayuda idónea, para ser su complemento; no tomó un hueso de su cráneo, como para que la mujer gobernara la familia, ni tampoco tomó un hueso de sus pies, como para estar sometida al hombre.
La mujer es creada por Dios para ser "compañera", ni arriba, ni abajo del hombre, al lado.
Una de los motivos preponderante en la violencia hacia las mujeres, es el convencimiento del hombre de su superioridad y primacía sobre la mujer, por siglos fuimos formados en un contexto cultural patriarcal, que se da en la mayoría de nuestras sociedades.
Las últimas décadas se caracterizaron por generar  toda una "revolución" en la igualdad de los sexos, la mujer comenzó a protagonizar un nuevo papel en las sociedades democráticas, se independizó laboral y económicamente, los anticonceptivos le otorgaron una liberación sexual, casi sin precedentes, no solo la mujer se pone en un pie de igualdad con el hombre, sino que llega a competir, maneja sus propias finanzas, los puestos laborales y sociales, puede optar por tener hijos prescindiendo de un marido y hasta de un hombre como su pareja, rompió con sus inhibiciones, y con siglos de sometimiento machista, (Solo basta prestar atención al lenguaje de las mujeres hoy con sus pares)
Muchos hombres hoy, no pueden aceptar o admitir este fenómeno, lo que genera ese tipo de violencia en particular, la "reacción del macho", las demandas, los celos, el dominio.
Tenemos todavía generaciones en transición, que fueron criados en familias patriarcales y no terminan de adaptarse a estos cambios, que en general fueron radicales y tempestivos.
Por cierto que ambas posiciones están equivocadas y han sido extremas, por causa del pecado y la pérdida de valores y principios Divinos, el machismo y el feminismo.
 En el machismo, la mujer perdió su lugar como persona, muchas veces siendo solo un objeto,  sojuzgada y humillada, (como algunas de nuestras abuelas y madres), no podían salir de sus casas, no tenían opinión ni voz, no manejaban el dinero familiar, ni pensar en estudiar o trabajar, debían satisfacer a sus maridos a expensas de si mismas, algunas eran sometidas a todo tipo de maltrato, y era hasta "aceptable" a los ojos de la cultura social, esto sucedió por siglos.
En el llamado feminismo, la mujer se independiza  al extremo, al grado de perder su femineidad, (hoy toma la iniciativa en la sexualidad) pierde de ser cortejada y conquistada (ellas conquistan hoy) arrasan con el romanticismo, pierde de ser cuidada y protegida por el hombre, muchas en vez de ser las compañeras del hombre, son sus competidoras, algunas gobiernan sus familias y a los hombres que tienen al lado, hasta en algunas Iglesias las mujeres tomaron su gobierno, se pierden a sus hijos, (la crianza), su lugar como madres, ya no tiene valor ninguno, a los ojos de la sociedades modernas, ser ama de casa, madre o esposa.
Hoy tenemos mujeres soldados, bomberos, policías, políticas, camioneras, constructoras, fontaneras, taxistas, etc.
Creo que hombres y mujeres, ambos perdimos, y seguiremos perdiendo, ¿la causa?: habernos salido del diseño o modelo del Creador.
Más nos apartemos de ese modelo, más graves serán las consecuencias, no habrá retorno, esto será una problemática global.
Entre los cristianos es raro encontrar violencia física de los maridos hacia sus mujeres, pero si se da un tipo de violencia tanto o más destructiva, que es la violencia psicológica o emocional, que para peor se ejerce en nombre de la fe, igual que en algunas culturas orientales, la mujer "debe someterse"..."debe obedecer" ...(y hasta usan textos bíblicos)
Para el cristiano, ni una tendencia ni la otra, el equilibrio en la relación entre los géneros, la mujer reconociendo al hombre como cabeza de la familia y el hombre tratando a la mujer como "vaso más frágil" dándole honor, dice la Biblia. (1 Pedro 3:7)
Si ambos nos ajustamos al modelo de Dios ninguno necesita competir o desplazar al otro, nos complementamos en forma armoniosa.

Fuente: Pastor Sergio Gebel