¿Podemos pedir lo que sea?
Me consultaban acerca de aquellos cristianos, que establecen una congregación en una zona, y comienzan a orar en contra de las otras Iglesias del lugar, o en forma particular, se ofenden con un hermano o pastor y oran para que Dios tome cuenta, y pese su mano sobre esos adversarios.
Fue público no hace mucho y subido a las redes, cuando uno de los pastores mediáticos, lanzaba una maldición contra todo aquel que se levantara en su contra y contra su ministerio, lo que demostró el autoritarismo y la ignorancia espiritual del tal.
Se piensa que por ser cristiano o siervo de Dios, recibimos un poder plenipotenciario para utilizar a capricho, una especie de inmunidad, para arremeter contra los que no están de acuerdo con nosotros, y lo más grave de estas posiciones, es pensar que Dios nos "obedecerá" y destruirá los que consideramos enemigos.
Dios es justo y nunca quebrará esa su justicia, respondiendo a caprichos humanos.
Una gran ignorancia acerca del carácter de Dios y de su palabra.
Los discípulos cometieron este error, pero ellos están más justificados que nosotros, todavía no estaba completa la revelación de las Escrituras (faltaba cerrar el canon del nuevo testamento), ellos estaban en un proceso de formación, y muchas cosas les serían reveladas.
"Mas no le recibieron, porque su aspecto era como de ir a Jerusalen. Viendo esto sus discípulos Jacobo y Juan, dijeron: Señor, ¿quieres que mandemos que descienda fuego del cielo, como hizo Elías, y los consuma? (Lucas 9:53-54)
Se ofendieron por aquel rechazo, y pretendían orar o "mandar" que descendiese fuego del cielo y consumiera a aquella ciudad Samaritana, e incluso lo avalaron, con la historia bíblica del profeta Elías.
La respuesta del Señor no se hizo esperar:
"Entonces volviéndose el, los reprendió, diciendo: Vosotros no sabéis de que espíritu sois; porque el Hijo del hombre no ha venido para perder las almas de los hombres, sino para salvarlas." (Lucas 9:55-56)
Aquel cristiano que ora pidiendo ruina o destrucción, el que maldice o desea el mal de alguien, (aún de sus enemigos) no sabe de que espíritu es, no entendió nada de la fe cristiana, y lo peor de todo es que piense, que puede funcionar, solo demuestra su profundo desconocimiento y poca espiritualidad.
Dios no escucha este tipo de oraciones, la oración no es incondicional, a capricho humano, a voluntad personal, podemos orar hasta perder la voz y sacarnos callos en las rodillas, Dios no oirá ninguna oración fuera de su voluntad, la misma oración modelo enseñada por Jesús lo aclara (el Padre nuestro)... "hágase tu voluntad, así en el cielo como en la tierra"
"Y esta es la confianza que tenemos en él, que si PEDIMOS ALGUNA COSA CONFORME A SU VOLUNTAD, el nos oye" (1 Juan 5:14)
Cuando se ora "en contra" de alguien, se violan principios espirituales cristianos, primero: no fuimos puestos para perder a nadie (Se lo dijo Jesús a Jacobo y a Juan)
Segundo: el mandamiento de Jesús:
"Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y ORAD (bien, pidiendo que Dios los bendiga) por lo que os ultrajan y os persiguen, para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y hace llover sobre justos e injustos" (Mateo 5:44-45)
Las nuevas doctrinas humanistas, el modernismo teológico han pretendido crear una "casta de elegidos", con "poderes especiales" sobre el resto de los humanos, intocables, inimputables, que pueden maldecir y arruinar a quien se les oponga, esta clase de "omnipotencia" ha pretendido desplazar a Dios de su soberanía, el verdadero cristiano cuando ora agrega.
"Hágase tu voluntad" porque sabe que sus oraciones no son incondicionadas, y que además si está en desobediencia o en pecado, ese pecado será un muro entre Dios y el.
"En lugar de o cual deberíais decir: Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello" (Santiago 4:15)
Fuente: Sergio Gebel
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